martes, junio 29, 2010

Boxeo de sombra

Por estas fechas, hace un año, estaba haciendo un inventario público de mi mismo. Ultimamente he repetido la experiencia, pero con aquellos puntos que entonces no quize tocar, es más, que ni siquiera era consciente de que ahí estaban, habitando en las profundidades de mi ser y que la tormenta reciente sacó a flote.

Este autoanálisis me ha dado unos cuantos golpes más bien sólidos, que me ha llevado rato digerir, algunos de los moretes anímicos ahí siguen, pero sé que este boxeo de sombra aún no termina.

Cada golpe es imitado, cada finta es anulada, sólo ves tu lado oscuro alerta frente a ti.

Es complejo lidiar con uno mismo, te conoces y sabes como trampearte. Es cómo jugar solitario, vas acomodando cartas hasta verte atrapado, y entonces decides si haces trampa o te declaras vencido. Pero la ventaja es que siempre puedes empezar de nuevo, obligado a una nueva estrategia, eso sí.

Apenas hoy, tras semanas de lidia, se me ocurrió cambiar la estrategia que me tenía entrampado: Caos, simple creatividad e intuición pura y dura, para sorprenderme a mi mismo y reinventarme.

A fin de cuentas, muchas veces volteo, miro al minuto que recién pasó y pienso: ¡Vaya! ¿Fui yo?

domingo, junio 06, 2010

Seguiré haciendo cosas


Round,
Like a circle in a spiral
Like a wheel within a wheel,
Never ending on beginning,
On an ever-spinning reel
Like a snowball down a mountain,
Or a carnival balloon
Like a carousel that's turning
Running rings around the moon
Like a clock whose hands are sweeping
Past the minutes on its face
And the world is like an apple
Whirling silently in space
Like the circles that you find
In the windmills of your mind!


Estas son los primeros versos de una de mis rolas favoritas, "The windmills of your mind", original del francés Michel Legrand, pero adaptada al inglés por Alan y Marilyn Bergman para la película "The Thomas Crown Affair", en su versión de los sesenta. Para la versión más reciente Sting hizo lo que pudo, pero nada memorable.

Me gusta en particulas la frase "Como un carrusel que gira, corriendo en círculos alrededor de la Luna", queda pues me acerco a mi vuelta número 39 al sol. Ya suena a mucho, y más cuando tus amistades van desde los 15 a los 45 años... particularmente con los que rondan los veinte y puedes contar montón de anécdotas de cuando ellos aun no nacían, y yo ya andaba de vicioso.

Pienso en la célebre crisis de los cuarenta, tendría que estar aproximándome a ella. No entiendo exactamente en qué consiste, si cuadra con la crisis que tuve recientemente, pero creo que no, la otra se dió por mi gran capacidad para ignorarme, pero esa es otra historia.

Hay muchas cosas que he hecho, tantas que he olvidado bastantes. Por ello me gusta también charlar con los amigos, me recuerdan aquellas que he olvidado -y no por ser malas anécdotas-. Sin embargo recuerdo lo suficiente, y estos son buenos días para hacer un balance.

Creo que bien que mal he conseguido una vida rica, aunque a ratos todavía tenga que acoplarme a ella. Hay infinidad de cosas que no tengo ni he experimentado, pero las que están aqui conmigo son más valiosas para mí. Tengo amigos que me escuchan y me regañan si es necesario, tiempo para mis desmanes y también salud e ilusión por la vida. Tengo una familia desquiciadamente genial y ganas de tararear.

Hay más cosas que se pueden pedir, pero esas siempre están ahí sin importar lo que sea y la verdad la gran mayoría de ellas no me interesan. Definitivamente puedo dedicar muchos más renglones a lo que tengo que a lo que no.

Así pues, me acerco a los cuarenta y me siento rico. No he vivido en balde y me he divertido bastante, tanto en las buenas como en las malas, no es un mal récord creo yo.

Sin embargo, seguiré haciendo cosas.